Como diseñadora teatral se ha enfocado principalmente en la investigación de las propiedas estéticas de la iluminación escénica, participando de diversos proyectos interdisciplinarios donde la luz se convierte en un factor fundamental más allá de un elemento funcional. A lo largo de sus años de trabajo ha desarrollado un compromiso con  proyectos escénicos críticos respecto a feminismos, inmediatismo, teoría queer, organización horizontal, estudios decoloniales y sensibilidad Camp. 

Su trabajo como ilustradora toma forma en el diálogo entre la técnica del collage punk, el cómic y la crítica feminista, generando diversas piezas para distintos proyectos y organizaciones con dichas perspectivas. 

Finalmente,  emprende la carrera de energías renovables con el objetivo de desarrollar escenarios auto-sustentables para el desarrollo de teatro itinerante  en espacios no convencionales.